Los niños pueden ser muy exigentes a la hora de comer, lo que puede ser una fuente de estrés y preocupación para los padres. En lugar de luchar contra sus hábitos alimenticios, una buena estrategia es encontrar formas creativas de preparar comidas rápidas y deliciosas que satisfagan sus gustos y necesidades. En este artículo, te ofreceremos algunas ideas de comida rápida especialmente diseñadas para los niños más exigentes.
En primer lugar, es importante recordar que los niños tienen gustos y preferencias diferentes a los adultos, por lo que es importante adaptar las comidas a sus paladares. Una buena manera de hacerlo es incorporando alimentos que les gusten en recetas saludables y equilibradas.
1. Mini pizzas caseras
Las pizzas son un plato favorito de muchos niños, por lo que una buena idea es preparar mini pizzas caseras. Puedes usar tortillas de trigo o panecillos como base y agregar los ingredientes que más les gusten, como queso, jamón, champiñones o pepperoni. Deja que los niños participen en la preparación, permitiéndoles elegir los ingredientes y ponerlos encima de la pizza. Esto les dará una sensación de control y probablemente estarán más dispuestos a probar algo nuevo.
2. Palitos de pollo crujientes
Otra opción de comida rápida que seguro les encantará a los niños son los palitos de pollo crujientes. En lugar de comprar los típicos palitos de pollo congelados, puedes prepararlos en casa con pollo fresco. Simplemente corta el pollo en tiras, pásalas por huevo batido y luego por pan rallado con especias. Luego, hornea en el horno hasta que estén dorados y crujientes. Acompáñalos con una salsa casera, como salsa de tomate o salsa barbacoa.
3. Wraps coloridos
Los wraps son una opción versátil y fácil de preparar que a los niños les encanta. Puedes utilizar tortillas de trigo o maíz y rellenarlas con una variedad de ingredientes coloridos, como pollo desmenuzado, lechuga, tomate, aguacate y queso. Puedes agregar también su salsa favorita, como mayonesa, mostaza o salsa ranch. Envuelve los wraps y córtalos en pequeñas porciones para que sean más fáciles de comer.
4. Nuggets de pescado
Si tus hijos son fanáticos de los nuggets de pollo, una buena alternativa es preparar nuggets de pescado. Puedes usar filetes de pescado blanco, como lenguado o merluza, y cortarlos en trozos pequeños. Pasa los trozos por huevo batido y luego por pan rallado con especias. Luego, fríe en aceite caliente hasta que estén dorados y crujientes. Acompáñalos con una salsa de yogur con limón para darles un sabor fresco y leve.
5. Nachos con guacamole casero
Los nachos son una opción divertida y sabrosa que a muchos niños les encanta. Puedes comprar nachos de maíz en el supermercado y preparar un guacamole casero para acompañarlos. Simplemente tritura aguacates maduros y mezcla con tomate, cebolla, cilantro, jugo de limón y sal. Sirve los nachos con el guacamole casero y deja que los niños se diviertan sumergiéndolos en la salsa.
6. Tortitas de zanahoria
Si quieres incorporar más verduras en la dieta de tus hijos, una buena manera de hacerlo es preparar tortitas de zanahoria. Ralla zanahorias y mézclalas con huevo batido, harina y sal. Luego, cocina las tortitas en una sartén con un poco de aceite hasta que estén doradas por ambos lados. Puedes servirlas solas o acompañadas de salsa de yogur con hierbas.
7. Helado de frutas casero
Para terminar la comida con un toque dulce, puedes preparar un helado de frutas casero. Pela y corta frutas como plátanos y fresas en trozos pequeños y congélalos durante unas horas. Luego, coloca los trozos de fruta en una licuadora y mezcla hasta obtener una consistencia suave y cremosa. Sirve el helado de frutas en pequeñas copas y decora con un poco de menta fresca.
No es imposible encontrar opciones de comida rápida que satisfagan los gustos de los niños más exigentes. Con un poco de creatividad y adaptación, puedes preparar comidas deliciosas y saludables que les encantarán. Recuerda involucrar a tus hijos en la preparación de la comida y ofrecerles opciones variadas para que puedan experimentar y probar cosas nuevas. ¡Buen provecho!
